Una de las responsabilidades fundamentales para los padres es mantener una adecuada salud oral de los niños, la misma es parte de la salud integral del niño, por lo tanto, incide directamente en su crecimiento, desarrollo y hasta comportamiento. Un particular cuidado en época de vacaciones debido a que el cambio de horarios y pérdida de hábitos puede terminar siendo perjudicial para sus dientes. Las vacaciones son un buen momento para agendar la cita pendiente con la odontopediatra y realizar una evaluación médica antes del regreso a clases.
Según la OMS (Organización Mundial de la Salud), a escala mundial del 60% al 90% de escolares tienen caries. En Ecuador el índice de caries en los niños también es alto:
Fuente: Parque Dental
Según un estudio realizado por Parque Dental, un 55% de padres indicaban que sus niños (en edades de 4 a 9 años) nunca habían presentado inconvenientes bucodentales, por otro lado, al realizar el análisis en boca de estos mismos niños encontrábamos que prácticamente la mitad presentaba inconvenientes bucodentales, siendo la condición más común la caries dental. Este desconocimiento del estado oral del niño hace que este mismo niño crezca con complicaciones y que en edades adultas presente con mayor facilidad problemas de halitosis, periodontitis, mal posición dentaria y que entonces tengan que someterse a tratamientos complejos, costosos y dolorosos. Estos descuidos en épocas de vacaciones aumentan pues muchos hábitos cambian (alimentación, hora de dormirse, tiempo de juego) y muchos controles se relajan.
Lastimosamente, los papás desconocen los principales cuidados que deben tener con sus hijos con respecto a su salud oral, ese desconocimiento trae consecuencias como: creencia de que los dientes temporales no son importantes; que los niños no sean atendidos por profesionales especializados; que no sepan las bases de la alimentación y cuidados en casa para mantener una adecuada salud oral; que los niños no frecuenten al odontopediatra y; que su primera visita sea cuando sean muy grandes o porque existen inconvenientes visibles. En definitiva, la salud oral está integrada con la salud integral del infante.
Te damos estos consejos de cuidado oral que son importantes tomar en cuenta en casa durante las vacaciones y antes del regreso a clases en guarderías y escuelas:
Higiene oral:
En niños en edades escolares los padres son los responsables de la higiene oral (al menos hasta los 8 años) luego de lo cual es importante su supervisión, se deben higienizar su boquita al menos 2 veces al día (mañana y noche), utilizando pasta con 1100 partes por millón de flúor, para evitar alteraciones en el esmalte y aparecimiento de machas en las piezas dentales. La cantidad recomendada de pasta dental debe ser del tamaño de una arveja, utilizando hilo dental y enjuague bucal.
Hábitos alimenticios:
La alimentación juega un rol importante en el cuidado de la salud oral. Por lo cual se recomienda un máximo de dos momentos de azúcar al día, así como evitar el consumo excesivo de alimentos ácidos o pegajosos. Así mismo la hidratación juega un rol fundamental puesto que la boca seca facilita el desarrollo de bacterias.
Controles periódicos con la odontopediatra:
Así se tenga un adecuado cepillado dental, conforme avanza el tiempo, se va generando una placa bacteriana que deberá ser evaluada y removida periódicamente por un especialista de tal manera que se prevenga de las caries y otras afecciones bucodentales comunes.
Es muy importante considerar que aproximadamente desde los 5 hasta los 12 años, los niños se encuentran en un proceso de recambio dental, es decir están en un proceso de cambio constante de sus dientes y los profesionales debemos percatarnos de cualquier inconveniente bucodental del infante de manera oportuna, considerando que una corrección a tiempo puede repercutir positivamente en el infante para el resto de su vida. Las mamitas en muchas ocasiones nos preguntan en esta etapa porqué los dientes temporales han demorado en caer, que los dientes definitivos no erupcionan o que los dientes están apareciendo “muy chuecos”. Todos estos inconvenientes pueden ser tratados oportunamente en consultorio por su odontopediatra. Por ejemplo, una de las complicaciones que se ha vuelto frecuente y que afecta el proceso de recambio dental es el frenillo labial superior.
Certificado dental
Algunos colegios tienen la buena práctica de solicitar a sus alumnos un certificado dental, ya que muchos problemas de lenguaje, alimentación, respiración e incluso concentración del niño en la escuela podrían estar asociados con algún inconveniente bucodental como: frenillos, mal posición dentaria, procesos cariosos severos, traumatismos (incluso pasados), pérdida de alguna pieza dental de manera temprana. Inconvenientes que deberían ser detectados y tratados a tiempo por un especialista odontopediatra. Al realizar el chequeo bucodental a nuestro niño aseguramos:
- Que el niño no presente ningún inconveniente bucodental importante que afecte en su rendimiento escolar.
- Que al haberse realizado recientemente el chequeo preventivo (profilaxis y fluorización) nuestro pequeño tiene menos probabilidades de contraer caries.
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